Nội dung text Clase 8-Manejo de agua y de urea.pdf
1 El riñón humano puede formar orina más concentrada o mas diluida con el objetivo de preservar la cantidad estable de agua que necesita el organismo para mantener sus funciones, excretando el exceso o reteniendo cuando falta, y excretar el exceso de solutos. La orina puede variar en su concentración de ser desde 40 mOsm/Kg H2O, mucho menor a la osmolaridad plasmática, a 1400 mOsm/kg H2O, mucho mayor a la osmolaridad plasmática. Relación ingesta/excreción de líquidos El riñón debe mantener una relación entre la ingesta y excreción de líquidos para mantener la osmolaridad plasmática. Es por esto que puede eliminar orina con un amplio rango de concentración. Sí hay un ingreso excesivo de agua al organismo, el riñón reacciona aumentando la producción de orina y el volumen urinario, pero con una orina más diluida. De esta manera esta agua excesiva que ingresó al organismo se elimina manteniendo la osmolaridad plasmática. Sodio El sodio ayuda a mantener el volumen del líquido extracelular y dentro de los solutos es el contribuyente más importante de la osmolaridad plasmática. La osmolaridad es la concentración de partículas osmóticamente activas (capacidad de mantener agua a su alrededor) expresadas en miliosmoles por litro (mOsm/l). En la práctica, la osmolaridad es igual a la osmolalidad (mOsm/Kg de H2O), porque 1 litro de Manejo renal de agua y urea
2 agua equivale a 1 Kg de agua. El valor normal de la osmolaridad de los líquidos corporales es de 290 mOsm/l, o para simplificar, 300 mOsm/l. El riñón regula exactamente el balance entre el ingreso de sodio al organismo y su excreción a través de la harina. Concentración y dilución de orina Para que la orina se pueda concentrar o diluir en el riñón deben darse 2 condiciones fundamentales. Una es que haya una médula renal hipertónica, y la otra es que los túbulos tengan ciertas características en su permeabilidad, que no es la misma en todos los segmentos y varía según la presencia o no de una hormona. En cuanto la médula renal hipertónica, quiere decir que la osmolaridad de la médula irá aumentando conforme se hace más profunda, es decir, conforme se aleja de la corteza. Esto dependerá de la presencia de sodio, en forma de cloruro de sodio, y de la presencia de urea. La osmolaridad de la médula renal cercana a la corteza será similar a la del plasma de 300 mOsm/l, pero en la zona más interna de la médula la osmolaridad asciende hasta los 1200 mOsm/l. En cuanto a la permeabilidad de los túbulos, significa que las distintas porciones de la nefrona como la asa descendente de Henle, asa fina y gruesa de Henle, túbulo contorneado distal y colector tienen distintos grados de permeabilidad al agua, al sodio y a la urea. Características tubulares En cuanto al agua, el túbulo contorneado proximal y el asa descendente son permeables al agua. En cambio, el asa ascendente fina no lo es, y mucho menos el asa ascendente gruesa que es completamente impermeable al agua. En el túbulo contorneado distal y el colector no son permeables al agua salvo que esté presente una hormona que es la antidiurética (ADH), que convierte estas secciones de la nefrona en permeables al agua. En cuanto al cloruro de sodio hay cierta permeabilidad en el túbulo contorneado proximal. En el asa de Henle hacia el túbulo colector hay impermeabilidad al cloruro de sodio. Desde el asa ascendente gruesa hacia el túbulo colector existe un transporte activo de sodio, es decir que existen mecanismos cotransportadores, que gastan energía y que sacan al sodio desde el conducto, en este caso el asa ascendente gruesa de Henle, hacia el intersticio. En esta porción es donde mas se encuentran concentrados los cotransportadores.