Tiêu đề LIBRO II. La barca de Caronte. ✅

CAPÍTULO 33 Compras de comestibles. Dos días después, Shi Shanyan fue reevaluado en la zona dividida. La reevaluación incluía un segmento de declaración del sentimiento más íntimo, el cual requería que describiera su aspiración para una mejor vida en un elegante lenguaje positivo. Shi Shanyan dibujó algunos huevos de pato en el papel y dijo: —Me gustaría entregar mi trabajo. El sistema no pudo detectar las palabras en el papel y respondió: —No. de serie 01AE86, por favor, conteste seriamente. Shi Shanyan hizo girar el bolígrafo y dijo: —Terminé de contestar. Después de un momento de silencio, el sistema respondió con franqueza: —Si quiere comer huevos de pato, puedo formular una aplicación para usted. —Estoy aburrido —Shi Shanyan se reclinó en su silla. La expresión en sus ojos era glacial—. Date prisa, maldición, y déjame salir de aquí. —Puede salir —el sistema dijo—. El césped frente al edificio siempre está abierto para usted. —¿Soy un perro que necesita orinar en el césped? —Shi Shanyan contrarrestó con una sonrisa. —No. de serie 01AE86, por favor, no haga eso —unas luces rojas destellaron en el sistema—. Aunque este lugar esté deshabitado, sigue siendo propiedad pública... —Dije que quiero salir —Shi Shanyan sostuvo su bolígrafo en alto y frotó su sien. Miró fijamente al sistema—. No pretendas que no comprendes. La base de datos del sistema nunca podía hacer frente a cuán cabeza dura era Shi Shanyan. Sintió lo que los seres humanos le llamaban un "dolor de cabeza" e intentó adoptar un estilo de comunicación gentil similar al de un maestro guía: —Unas vacaciones son un buen momento para tomar un descanso. Puede dormir, o quizás leer.