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Estados de la materia En la materia podemos encontrar diversos estados: sólido, líquido y gaseoso, cuyas propiedades varían entre sí. Sólidos: Átomos encontrados de manera ordenada, distancia entre moléculas muy pequeña, fuerzas intermoleculares (entre moléculas) máximas, es decir, no tienen libre movimiento, y poseen forma y volumen constantes, suelen ser rígidos. Líquidos: Átomos encontrados de una manera no tan ordenada que les permite fluir, distancia entre moléculas media, ligeramente compresibles dependiendo de condiciones de presión y temperatura, que tienen volumen constante y se adaptan a la forma del recipiente que las contiene. Gases: En estas sustancias, la distancia entre átomos es muy grande, no poseen un volumen constante pues pueden comprimirse al máximo, sus fuerzas intermoleculares son despreciables y se adaptan a la forma del recipiente que las contenga. Estos estados de la materia pueden presentarse para todas las sustancias e intercambiarse entre sí, tal es el ejemplo del agua, que podemos encontrarla como gas en las nubes, como líquido en las botellas de agua y como sólido en el hielo, en donde su estado depende completamente de la temperatura donde la sustancia se encuentre. Cuando las sustancias cambian de estado a estado, este cambio tiene un nombre en específico, llamados cambios de estado de la materia, cuyos nombres específicos abarcaremos en las siguientes páginas.