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Jerarquía Directiva 2024 CURSO DE ACCESO A LA JERARQUÍA DIRECTIVA INTRODUCCIÓN A LOS ESCENARIOS CONTEMPORÁNEOS INSTITUTO DE CIENCIAS JUNÍN | Luis Marcó N° 106 - Junín
www.institutodejunin.edu.ar WhatsApp: +54 9 263 461 5682 Facebook Especialista en Gestión Prof. Dora Sosa Instagram Una breve mirada de los escenarios sociales de los últimos años hasta el 2015 Si se da una mirada a los procesos históricos en lo político, social, económico y cultural del contexto internacional y de América Latina y el Caribe, se puede analizar cómo éstos pro- cesos inciden en la educación de los países de la región y de acuerdo a nuestro interés de estudio, en Argentina. Según Aldo Ferrer, la gran crisis económica mundial de 1930 termino de demoler las reglas del juego del sistema global. Sobrevivía el viejo dominio imperial sobre una tercera aparte de la humanidad radicada en las posesiones coloniales de África, Medio y Extremo Oriente. Pero los movimientos de independencia comenzaban también a estallar en todas partes. La liberación de las colonias se consumaría en el transcurso de la Segunda Guerra Mundial y la temprana posguerra. La crisis, con respecto a Argentina, transformó radicalmente el contexto internacional den- tro del cual se había desarrollado su economía. Los mercados mundiales de alimentos y materias primas se desplomaron. La relación Estado - Sociedad - Educación se articuló en torno a modelos educativos dirigi- dos a atender las prioridades sociales definidas como tales, por quienes tuvieron a su cargo la conducción del Estado. Estos modelos, a su vez condicionaron las demandas y las carac- terísticas de la participación de la sociedad en el proceso educativo, como lo hicieron el Estado oligárquico liberal, el Estado Benefactor y el Desarrollismo, cada uno con sus pro- pias características. En la década del 70 el modelo de Estado Benefactor comenzó a mostrar signos de agotamiento. La Argentina quebró su ciclo de crecimiento sostenido para ingresar en un periodo de estancamiento, desinversión y desindustrialización que se mantuvo hasta los inicios de los 90. En este periodo se inició un proceso de marcado pesimismo respecto del aporte de la educación a la economía. Este pesimismo tuvo su sustento en la crisis mun- dial y en la vigencia de teorías que enfatizaron únicamente el papel de la educación en torno a la reproducción de desigualdades socio - económicas. También es relevante considerar en el país tres etapas de la educación que se destacan: edu- cación para la liberación, educación para el orden y educación para la democracia. En la
www.institutodejunin.edu.ar WhatsApp: +54 9 263 461 5682 Facebook Especialista en Gestión Prof. Dora Sosa Instagram primera, la educación como derecho social, recuperó la centralidad, reemplazando la con- cepción desarrollista de la formación de recursos humanos. El plan trienal priorizó la ex- pansión del nivel primario y la educación de adultos, procurando complementarlas con el conjunto de estrategias sociales. La muerte de Perón y la continuación del gobierno a cargo de María Estela Martinez de Perón, marcó el inicio de la etapa de educación para el orden. Esta segunda etapa, a cargo de un gobierno de facto que institucionalizó un mecanismo de sucesivos presidentes militares, y que escribió una página oscura de sangre y terrorismo de estado en la historia argentina, tuvo como objetivo la restauración del orden y la seguridad. En este sentido la reforma en el sistema educativo estaba dirigida a transmitir normas y valores que garantizaran la vigencia de un modelo autoritario. La educación era un recurso para garantizar el orden social y las transformaciones planteadas. Se volvió a la idea de formar recursos humanos para el desarrollo económico. El rol político en la educación es- tuvo centrado en concebir el proceso de enseñanza - aprendizaje subordinado al orden y la disciplina. La guerra de las Malvinas marcó el inminente inicio del tercer periodo con el primer gobierno democrático que presidió el Dr. Raúl Alfonsín a partir del año 1983. En esta etapa la función política principal de la educación estuvo dirigida a desmantelar el or- den autoritario de la etapa anterior y construir una participación democrática de la sociedad, comenzando por la creación de los centros de estudiantes a nivel secundario y universitario, como también la incorporación de los docentes cesanteados durante la dictadura. A nivel nacional no se hicieron grandes cambios en cuanto a los contenidos en general, aunque en algunas jurisdicciones se elaboraron reformas profundas. No obstante, el efecto democrati- zador de esta tercera etapa produjo situaciones contradictorias y a veces violentas, generan- do estado de malestar con una reminiscencia de la "autoridad perdida", y con la imposibili- dad de dar respuestas a las demandas sociales, especialmente de los sectores más vulnera- bles y por ende más necesitados. La década de los 80 fue definida por la CEPAL como la década perdida de América Latina, porque descendió el PBI por habitante, mientras que la deuda externa, la inflación (que al- canzó los dos dígitos) y la desigual distribución de la riqueza, se ubicaron en el valor más alto del mundo.
www.institutodejunin.edu.ar WhatsApp: +54 9 263 461 5682 Facebook Especialista en Gestión Prof. Dora Sosa Instagram El aumento de importancia de la Comunidad Económica Europea y del comercio intraco- munitario, la declinación de la hegemonía económica de Estados Unidos y el fenómeno de "estanflación" global, comenzaron a revertir el movimiento hacia una liberación comercial. El Estado benefactor cayó en una crisis sin precedentes con ineficiencia, burocratización y centralización en lo administrativo, en lo social la indiferencia de políticas asistenciales a quienes más las necesitaban, en lo político la poca capacidad de sostener la gobernabilidad y en lo económico la imposibilidad de sostener el empleo, escasa capacidad empresarial y dificultades para conducir exitosamente un modelo de desarrollo. Luego de la caída de los ochenta, el comercio internacional experimentó una lenta recuperación, reafirmándose la tendencia que pasa por los años noventa hasta la actualidad hacia un crecimiento más rápi- do del comercio que de la producción mundial. El intercambio comercial global creció de forma constante a una tasa superior al 6% anual interrumpida en el 2001 por el estallido de las tecnologías de la información, afectando la crisis económica simultáneamente a los tres centros de poder mundial y los acontecimientos del 11 de setiembre con el ataque a las to- rres gemelas. El avance y consolidación del proceso de globalización, apoyado esencialmente en el salto sin precedentes de las TIC, el transporte y las comunicaciones, se ha combinado con la vir- tual universalización de las políticas neoliberales de apertura y liberalización, otorgando una dinámica renovada a las transacciones comerciales internacionales, convirtiéndose en el motor fundamental del crecimiento económico de algunas regiones. No obstante, este nuevo orden comercial global, continúan reproduciéndose las relaciones históricas de po- der, que privilegian a los países industrializados y sus grandes empresas transnacionales, en detrimento de los países subdesarrollados incapaces de promover un desarrollo humano con crecimiento económico sostenible y equitativo, indispensable para atender las necesidades humanas. También las posibilidades de acceso a los avances tecnológicos y productivos vitales necesarios para la productividad del trabajo y el crecimiento económico, tienden a una distribución desigual, siendo muy relevantes en las últimas décadas debido a la intensi- dad y velocidad del cambio tecnológico, lo que ha significado contar con cuantiosos fondos para financiar la investigación y el desarrollo, constituyéndose en una fuerza de intercam-