Content text Capitulo 4. Enamorate de Dios.pdf
FULVIA ARBOLEDA DE CAÑAS UNA INVITACIÓN A TOCAR EL TIERNO CORAZÓN DEL PADRE ¡Enamórate de Dios!
SANTIDAD: REQUISITO IMPRESCINDIBLE PARA DELEITARME EN EL AMOR DEL PADRE 4
¡ E N A M O R AT E D E D I O S ! 107 E s tan importante y tan consistente la pregunta de Pablo cuando el Señor Jesús se le apareció en el camino, que la retomo para iniciar este capítulo: “¿Qué quieres que yo haga? Saulo únicamente necesitó cinco palabras para decirle al Señor que se rendía y estaba dispuesto a todo por Él, y Dios no necesitó escuchar más. Cuando uno se encuentra con Dios, con Jesús y con el Espíritu Santo, no necesita entrar en rodeos ni explicaciones. En una frase de cinco palabras Saulo le dijo al Señor que lo estaba conociendo directamente, que reconocía su autoridad y poder, y que había empezado a enamorarse de Él. Esto es rendición total. Cuando Saulo hizo la pregunta que reveló su rendición, Jesús le dijo: “...Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer” (Hechos 9:6 R.V 1960).
F U LV I A A R B O L E D A D E C A N A S 108 Durante tres días no comió ni bebió. La rendición empieza con la decisión de prescindir de cualquier conexión con el mundo material. Hay que buscar a Dios y depender de Él. Renunciar a lo material es una de las decisiones más difíciles del ser humano, pero hay que hacerlo. Cuando uno determina depender de Dios, cuando uno está dispuesto a demostrarle entrega al que ama, lo material es un obstáculo si no se limita su lugar. No es que no tenga posesiones o cosas por el estilo, es que las mismas no ocupen el lugar que le pertenece a Dios ni sean la prioridad. Dios necesitaba debilitar a Saulo físicamente para fortalecerlo espiritualmente. Dios necesitaba cerrarle los ojos físicos por un tiempo, para que aprendiera a ver con los ojos espirituales. La misión que el Señor tenía para él exigía esas dos cosas. Más adelante pasaría tiempos de hambre y, para entonces, estaría preparado. Durante el desarrollo de su trabajo misionero y de predicación, Dios le daría revelaciones que solo entendería en la dimensión espiritual. ¿Ahora entiendes el porqué y el para qué de esa condición o estado en el que quedó Saulo esos tres días? Mientras Saulo entraba en ese proceso que no entendía, pero que estuvo dispuesto a aceptar y vivir, Dios preparó a alguien para que se encontrara con él y le explicara la misión que le tocaba, para la que había sido escogido: Ananías. Dios siempre tiene a alguien para hablarte e indicarte lo que debes hacer